Mariyana Huseinovic es una soldado de élite cuyo nombre de guerra es La Diana. Avezada en el uso de distintos tipos de armas y experta en las artes marciales, ella se define como una máquina para matar. Sin embargo, esconde un secreto que la vuelve vulnerable y débil, tanto como lo era a los veinte años cuando, al estallar la guerra en Bosnia, su tierra natal, se convirtió en víctima de los serbios nacionalistas y esclava en un campo de concentración.
Pero La Diana ha decidido emprender su venganza y destrozar a los dragones que la convirtieron en esa mujer fría, llena de odio y dolor. Solo que el destino le tiene preparada una sorpresa y sus planes bien trazados tomarán otro camino. ¿Quizás el de la redención?
Absorbente, ambiciosa y muy documentada, Aquí hay dragones es la esperadísima novela de Florencia Bonelli sobre uno de los personajes más queridos de la saga Caballo de fuego. Una novela repleta de acción, personajes y aventuras que reserva un espacio privilegiado para el amor. Una lectura que no se puede abandonar hasta la última página.
Desde que terminé la trilogía Caballo de Fuego deseo conocer cómo siguió la historia de los personajes que llenaron de pasión aquellos libros.
Quería más de Juana, también un libro de Jerome adulto (Ya está en edad, eh!) y especialmente saber más sobre La Diana. Esa mujer a la que no le tocó el mejor final en la trilogía y que siendo un personaje muy secundario, llamó la atención de los lectores.
Después de siete años y a través de dos extensos libros, Florencia Bonelli por fin nos presenta la historia de LA DIANA.
Mis sensaciones
Si bien algo les adelanté en mis historias de Instagram, la primera entrega de esta bilogía tiene muchos puntos para analizar. Algunos me encantaron y otros hicieron la lectura insoportable. ¿Puede ser posible esto? Increíblemente la respuesta es: ¡Sí!Más allá de lo que me gustó y lo que me molestó, debo aclarar que para mi lo más importante era LA DIANA y este es el punto desde donde enfoco mi reseña.
Este personaje se ganó un libro como protagonista porque su personalidad cautivó a los lectores. Su historia, su pasado y lo que sucedería en su futuro era lo que los lectores queríamos saber.
Lo que necesitábamos era descubrir a esa mujer que no permite ser tocada. Aquella que perdió a su novio por no poder vencer sus miedos, aquella que soportó lo más inhumano que alguien puede vivir y se reconstruyó como pudo.
Lamentablemente cuando Florencia Bonelli intenta construir una historia de amor para La Diana, termina rompiéndola hasta hacerla irreconocible.
Pero vamos por partes...
El discurso
En las primeros capítulos de "Aquí hay dragones" nos reencontramos con LA DIANA. La ex empleada de La Mercure (la empresa de seguridad al mando de Eliah Al Saud), ahora se ha convertido en un soldado de elite.Este tramo de la historia nos muestra a una protagonista que abatida por el pasado y su necesidad de venganza se esforzó hasta conseguir ser una maquina de matar.
El discurso en este punto abruma por la gran cantidad de personajes que se introducen en la historia y un semillero de temas que convierten a la lectura en un terreno pantanoso. La gran extensión de los capítulos y los distintos hilos que la autora abre, tiñen las páginas de un clima pesado, espeso y sombrío.
Pasado el cuarto capítulo, uno se pregunta si en algún momento esta lectura se convertirá en una novela romántica. Porque mientras sorteamos entrenamientos, reuniones tácticas y misiones militares, sentimos que estamos leyendo una novela de acción y espionaje.
No tengo nada en contra de ese género pero algo que las editoriales y los autores deben saber es que las lectoras antes de comprar un autor, compran el género que les gusta leer. Generalmente, apostamos a autores porque no nos defraudan. Linda Howard siempre me dará suspenso romántico y Susan Elizabeth el más dulce romance. Entonces, ¿Qué buscamos en un libro firmado por Florencia Bonelli? Romance.
Luego de muchas páginas, "Aquí hay dragones" comienza a mostrar los ganchos necesarios para entretener al lector, pero eso sucederá si permanecieron leyendo una historia que al principio no es alentadora. Esto es para lectoras de fe.
El discurso está narrado con dos voces diferentes. Por un lado, una voz omnisciente relata en tercera persona el presente de La Diana.
Luego, aparece en primera persona la voz de la protagonista, cuando comienza a escribir un diario íntimo narrando los años en Rogatica, mientras estuvo prisionera junto a su hermana Leila.
Esta parte es lo mejor del libro. Gracias a esta parte del relato seguí leyendo esta novela, porque mi necesidad de conocer toda la historia que ella escribía fue más grande que la frustración con la que leía los relatos del presente.
Es excelente. Cada página del diario íntimo es perfecta. La Diana nos cuenta una historia, la suya y Florencia Bonelli la construyó de un modo impecable. Tiene su principio, bañado de inocencia y fe. Su nudo, inundado de sangre, lágrimas e impotencia. Y el final, que esconde un grito que desgarra el alma.
Los climas de esta dramática historia están construidos con tanto talento que uno lee estas páginas con los puños apretados y el corazón en pausa. Uno está ahí. Sintiendo los olores, el dolor, el odio y la injusticia. Se siente.
Es tan oscuro, frío y triste que se necesita levantar la vista del libro unos segundos para poder seguir. Y cuando un autor logra eso, es maravilloso.
Cada escena, está descripta con tanto detalle que comenzamos a sentir lo mismo que La Diana y Leila y creanmé que no es nada grato.
Lo que sí, al margen de lo duro del relato, es interesante. Se devoran las páginas absorbiendo parte de una historia real transcurrida en la década del noventa. Y Florencia Bonelli la describe con datos sólidos, mostrándonos que en una parte del mundo la humanidad se había perdido y el resto del mundo miraba para otro lado.
Se nota el exhaustivo trabajo de investigación por parte de la autora y aunque por momentos termina entorpeciendo el relato no deja de ser admirable.
Entonces, primero pasamos los capítulos de acción, luego nos sumergimos en el pasado de la protagonista y finalmente aparece el amor.
¡Y acá se me vino abajo el libro!
Ya les contaré algo más cuando hable de los personajes, pero respecto al discurso, les diré que lo encontré ANTIGUO.
El paradigma de la comunicación es el que más rápido cambia y ese cambio nos pasa más desapercibido que cualquier otro. Es por eso que el modelo romántico que hace unos años nos parecía hermoso hoy nos puede resultar ridículo, inverosímil, innecesario y VENCIDO.
Es gracias a las nuevas autoras, que nos han presentado un nuevo modelo de amor y con nuestra aceptación nos han llevado a leer muchas historias bajo la nueva propuesta. Ahora ya tenemos tan incorporado este nuevo paradigma, que al leer los diálogos "románticos" que nos propone Bonelli, no sabemos si vomitar o reírnos,
Florencia Bonelli se quedó en la década del noventa y así como cuando escribe para adolescentes, describe la adolescencia de hace tres décadas, cuando quiere enamorarnos con el discurso de su galán sólo logra alejarnos.
Tal vez en el género de la novela histórica su estilo narrativo no desentone tanto pero en la novela contemporánea ya no hay lugar para un discurso tan pasado de moda.
Los personajes
Lo peor del libro es el quiebre que se produce en el personaje de La Diana cuando conoce a su amor, Lazar Kovac. A su lado, la soldado de elite desaparece y su lugar es ocupado por una romántica adolescente. Y en este cambio, Bonelli se lleva la esencia de la protagonista. Todo lo que resultaba atractivo en La Diana se esfuma en cada diálogo que mantiene con Lazar.Un exceso de "mi amor" en cada línea y un protagonista que tiene un inexplicable impedimento para llamarla por su nombre. Cada conversación entre ellos parece escrita por una niña de tercer grado donde hace uso y abuso del "Amor mío", "Amor de mi vida", "Mi amor". La idea del amor predestinado y rápido también me resulta no sólo antigua sino que poco interesante. Al menos en una historia como esta. Y el hecho de que en nueve días sean el uno para el otro, le quita valor a todo lo construido alrededor del personaje de la protagonista. Una pena, que más que pena me dio vergüenza.
Es el carácter de Mariyana Huseinovic, la "Diana" del pasado el que me cautivó en cada pasaje del diario íntimo. Su inocencia robada, su valentía, su coraje y su llanto entre dientes me despertó una admiración inmensa. Es a esa chica, que cayó prisionera de la crueldad más bestial, a la que se le debía una historia mejor. A esa sobreviviente se le debía una gran historia de amor, mucho más profunda y admirable que la descripta en "Aquí hay dragones".
La Diana merece un hombre con el que no tenga que discutir entre un sin fin de "mi amores" en qué momento se coloca el cinturón de seguridad, por ejemplo.
Realmente me decepcionó mucho esta historia a la que no le encontré nada de romántico, como tampoco una gota de pasión.
Y el gran problema fue el personaje de Lazar Kovac. Por más que la autora no se canse de advertirnos la imponente belleza de este hombre en cada capítulo, su personalidad hizo que no le encontrara atractivo.
Me resultó un PESADO. Parecía un chiquito con problemas al que no se lo podía dejar solo. A todos lados tenía que ir con La Diana, en cada oración había un "amor mío" que ni Arjona se atrevería a decir y todas las virtudes con las que lo describen quedan tapadas por un exceso de cursilería.
El amor no es posesión y tener que ir hasta al baño acompañada no es sano. Tal vez, ese modelo de amor también tiene que ser sujeto a revisión porque los tiempos han cambiado, las mujeres hemos crecido y también aprendimos. Ni tuya, ni mío.
El personaje que más me cautivó es Vuk. Siniestro, inhumano y detestable. Pero es el mejor construido por parte de la autora. Es atractivo desde su oscuridad. Tiene distintas capas (todas repudiables) y es el más sólido del relato. No deja de ser interesante tratar de descubrirlo en cada página donde aparece y tratar de comprender su monstruosidad. Por otro lado, la obsesión que tiene por Mariyana resulta fascinante y las emociones que nos despierta su bestialidad nos mantiene atadas a la lectura queriendo saberlo todo hasta que la historia lo haga pagar todo el daño cometido. Realmente es el personaje más interesante de la obra.
El tema
Sé que estoy siendo muy extensa con la reseña, pero es mucho lo que me me dejó esta lectura. Es admirable la cantidad de información que recopila Florencia Bonelli para escribir sus historias y también es sorprendente la capacidad que tiene para tejer una trama con hilos tan interesantes.En esta historia hay mucho de todo. Desde los alimentos transgénicos, la guerra de los Balcanes, el tráfico humano, las traiciones, la corrupción, etc.
Realmente es increíble como todo esto puede estar entrelazado para darle forma a una historia que esta escrita con mucha información y talento.
En resumen,
No colmó mis expectativas y sólo espero que Lazar Kovac no sea el amor que Florencia pensó para La Diana. Ojalá sea un puente necesario para llegar al amor más real. Desde que empecé la lectura sentí que el hombre para la protagonista era Nanuk y no pierdo mis esperanzas. (especialmente luego del final)Hablando del final... es una trampa. Un recurso también antiguo y que no me gusta para nada. Esperar medio año para leer la segunda parte me parece ridículo y no tiene sentido alguno, pero hay gente que necesita más tiempo que otros para entender que el mercado editorial ha cambiado.
No me gustó pero las partes del pasado en Rogatica son tan interesantes y están escritas con una pluma tan perfecta que no me arrepiento de haberlo leído. Realmente es la joya del libro y seguramente leeré el segundo libro, porque no podría perderme por nada del mundo la historia entre La Diana y Vuk. Sin dudas lo mejor de "Aquí hay dragones"
Y ustedes, ¿qué sintieron con esta lectura? Las leo atentamente y sé que las defensoras de Bonelli van a saltar al leer esta reseña. A ellas les digo, no se alteren. No me expliquen el libro, no justifiquen las elecciones de la autora. No pasa nada, son gustos. Leer es un placer y ser objetiva es mi compromiso. ¿O acaso cabe alguna duda de cuánto amé los libros de Florencia Bonelli?